domingo, 18 de mayo de 2008

La Gran Dinastía Aqueménida...

Naqsh-e Rustam. Iran.

A tan solo 3 km de Persépolis se alza un risco vertical en cuya pared se dan cita los reinos Elamita, Aqueménida y Sasánida. (desde el 2500 ac al 438 dc).
En el extremo izquierdo del muro, un bajo relieve Elamita del periodo medio, y siguiendo la pared los impresionantes hipogeos cruciformes de Darío I, Artajerjes I, Jerjes y Dario II. Debajo de cada mausoleo, los grandes relieves del periodo Sasánida, cuyos reyes se consideraban descendientes de los reyes Aqueménidas.
Frente a las tumbas se eleva una torre de fuego probablemente Zoroastriana, religión que adopto el Imperio Persa como oficial sin dejar de lado la aceptación de otros dioses de tradición Asiría e incluso algunos provenientes de pueblos que conquistaron. (Respetaban y consultaban los santuarios griegos a cuyos oráculos, como el de Delfos, les eximia de pago de tributos, contribuyeron al levantamiento de templos en Egipto y permitieron que los judíos reconstruyeran el Templo de Jerusalén). Los hipogeos están ricamente ornamentados teniendo siempre presente el Ahura Mazda (dios del zoroastrismo) y una decoración que se dice tiene reminiscencias Hurritas (uno de los primeros pueblos indoeuropeos que se asentaron en Oriente).

Los Reyes Aqueménidas se caracterizaron por ser unos reyes tolerantes al respeto de las costumbres y religiones de los pueblos conquistados. Un claro ejemplo de ello lo encontramos en la persona de Ciro el Grande. Tras conquistar Fenicia, Palestina y Siria, entro en Babilonia y tras derrotar a su rey sin destruir la ciudad (otra cosa que estos reyes solían hacer), libero al pueblo judío esclavo y los devolvió a sus tierras… Igualmente, a Darío I (“Rey de Reyes”) se le ha considerado siempre un rey magnánimo con sus enemigos, de quienes incluso adopto las cosas positivas. Es más, fue este Rey el que al organizar sus territorios en provincias (Satrapías) decidió poner gobernantes locales como jefes de las mismas y no personas afines y cercanas a él, lo que resulta cuanto menos increíble y además les concedió una notable autonomía. Igualmente increíble fue su política contraria a la esclavitud, todos los trabajadores que participaron en la construcción de Persepolis eran asalariados, una idea totalmente revolucionaria en la época. Otra de las cosas que sorprende y que recoge el propio Herodoto, es que los principios morales en los que se basaba el Imperio Persa Aquemenida eran dos: la verdad y la justicia, y esos principios los trasladaban a todos los aspectos de la vida rutinaria. A los niños se les enseñaba a no mentir desde muy pequeñitos y esa misma regla de conducta regia tanto a gente común como a los propios gobernantes. Dice Darío en una tablilla encontrada: "No soy amigo ni de mentir ni de hacer el mal. Yo mismo me rijo por la corrección. No he hecho mal ni a ricos ni a pobres. Aquel que me ayude en mi casa, siempre será recompensado. Aquel que trate de herirme, será castigado"

¿Por qué os cuento todo este rollo? Pues porque creo que algunas civilizaciones han sido injustamente tratadas por la historia y desgraciadamente, algunos relatos de hoy en día y el cine (“Los 300…”: Persas malos, Espartanos buenos… pues a los Espartanos es para echarlos de comer aparte, con todos mis respetos) nos han mostrado una cara que no siempre se corresponde con la realidad. La cultura no solo Aquemenida sino la Persa en general es una gran descocida y sin embargo es tan sumamente rica que creo que debe conocerse.

4 comentarios:

Nur dijo...

Tu siempre contándonos cosas tan interesantes. Efectivamente hay muchas culturas, no sólo la Persa, que son desconocidas para muchos.

Pero, como cinéfila que soy, disiento de la afirmación que culpa al cine de ése desconocimiento. Pienso que no hay que matar al mensajero. El fallo no está en en cine o la tele, ése es el camino más fácil, echarles la culpa de todo, el fallo está en la educación recibida ¿? en nuestras casas y en los colegios, que es tremendamente deficitaria.Tenemos un déficit cultural vergonzoso en todo el planeta, con generaciones enteras criadas enfrente de una pantalla de ordenador o de televisión, sin ningún adulto que les explique lo que vé ni les instruya. y dejo aquí el tema de la educación porque si no, tenemos que hacer otro Blogg, ja ja.

El cine puede, y debe ser, un instrumento de culturización, a la par que de entretenimiento.
Existen cientos de películas de esas que " no son comerciales" interesantísimas, dónde podemos ver la realidad cotidiana de muchos de ésos países de los que tanto y tan bien nos hablas ( precisamente hay películas Iraníes muy interesantes)..... pero hay que ir a verlas.

En cuanto a 300", no sé si se debe a un fallo en la distribución de la película o a qué, pero 300 NO es una película histórica, es un "COMIC ( Tebeo en cristiano) llevado al cine", como en su día lo fueron Superman, Batman o Mortadelo y Filemón p.ej. y como tal hay que verla, porque en los comics ya se sabe, los buenos son muuuuy buenos y guapísimos, y los malos, son malíiiiisimos y muy feos, a menos que sean chicas, en cuyo caso son guapas y sexys ( ¡ ay el machismo!).

Pero claro, todo esto te lo tienen que explicar para que lo entiendas y no te crees imágenes distorsionadas de la realidad.

Un saludo

Mar Romera dijo...

Ja, ja. Nur. Estoy muy de acuerdo contigo en muchas cosas y al hilo de la pelicula "300" se ha creado más de una amena "discusion de bar" con algunos amigos...

Está claro que la educación es la clave que permite discernir entre esa realidad y ficcion histórica.
En mi caso, y pese a saber que esta pelicula fue fruto de la "imaginacion" de una persona en concreto que plasmó en un comic su "visión", me hace cuestionarme algunos aspectos:

1.- Dado precisamente el bajo nivel cultural en general ¿no puede una pelicula como esta crear una tremenda confusión al respecto del hecho histórico?

2.- ¿Por qué no pudo el autor inventarse personales "ficticios" o guerras "ficticias" que no llevaran a tal error?

3.- ¿Por qué siempre los ¿arabes? en este caso persas (que no arabes, aunque muchos los identifiquen como tal) son los malos de todas las peliculas?

No me malinterpretes, yo creo que el cine puede ser un instrumento educativo excelente y plasma realidades de las que no sabríamos en otras circunstancias, pero (aqui sale mi rama de pseudo-historiadora), a mi me gusta ver que los hechos historicos se tratan con un poco de rigor... en fin, no lo puedo evitar, ja, ja.

Gracias por tu post, y si, lastima que no se pueda entrar más en debate ¿verdad?.

Mil saludos

Nur dijo...

Buenos días guapa, ¡hay que penita estar lejos y no podernos sentar tranquilamente a charlar horas y horas!, pero bueno, al menos tenemos Internet.

Con respecto a los tres puntos que me planteas te diré:

1.- La misma confusión que muchos libros de Historia, según quién los escriba, no olvides que la Historia siempre la escriben los vencedores. Pero, yo creo que esto es como los tan criticados conciertos de los tres tenores, si sirve para que algunas personas busquen e intenten saber más acerca de la historia que se les cuenta ¡entonces ha sido un éxito!

2.- ¿Para qué inventar algo, cuando la realidad supera con creces cualquier ficción?

3.- ¿ Quién pone la pasta para la película? ja ja ja, ahí tienes la respuesta ¿Te acuerdas cuando los indios eran los malos de las pelis? ¿ o los hispanos ( éstos lo siguen siendo) o los negros? pues ahora les toca a todo lo que huela a árabe o parecido según ellos, ya se les pasará, ¿ tal vez cuando tengan un presidente llamado Obama? ...... uhm, creo que va a ser interesante

Bueno, ¡ya está bien! me estaría todo el día de charla contigo......... ¡hay que currar!

Ub beso fuerte

Peredmirasol dijo...

la mala visión de la cultura persa se ve reflejada por culpa de la religión cristiana
sobretodo en el antiguo testamento se hacen referencias hacia babilonia como una ciudad enorme, sorprendente, pero terrible, infiel... ya el nombre que le dieron, Babel, significa confusión, pues ahí hubo la primera"rebelión colectiva de la humanidad contra Dios", en gen, is(II), etc, en muchas ocasiones se da una mala visión, y quieras o no, la Biblia ha tenido una influencia brutal en occidente a lo largo de los siglos

aparte de eso, también hay esa manía por las guerras médicas, mucha gente cree que nuestra cultura es prácticamente griega (desde hace mucho, Shelley, lord Byron...), y uno tiende a pensar en una guerra con buenos y malos, los buenos son o uno mismo, o el ganador, en este caso son los 2.
Gran parte de nuestra cultura sale de Persia, muchos filósofos y estudiosos griegos solían ir a viajes por Egipto y Persia (por ejemplo el ya mencionado Heródoto), pero la gente no tiende a pensar así, quizá porqué es una de esas cosas que no se enseñan, que la gente no conoce, mientras que de pequeños en la escuela, poco o mucho, se estudia a los griegos


el antiaquemenidismo (o como sea que se llame) existe desde hace mucho tiempo, mucho mas que el cine, puede que el cine aumente esa situación, pero es una situación ya existente